Julio Cardero es el presidente de la Federación Riojana de Asociaciones de Alcohólicos en Rehabilitación, una institución que el próximo sábado 12 de abril celebra en Nájera la I Jornada sobre Alcoholismo. En este acto se entregarán los premios del concurso de cortos sobre drogodependencia, producidos por los propios jóvenes de la ciudad.
¿En qué consiste este concurso?
– Es un concurso en el que participan los centros de Nájera desde el año pasado y que para el próximo se convertirá en regional. Fue una buena idea para concienciar a los chavales, como futuros consumidores de alcohol. Queremos que sepan que es perjudicial.
¿Es difícil su mensaje en una tierra que hace culto al vino?
– Sí, lo es. Aquí hay grandes productores, pero hasta los elaboradores saben que el exceso perjudica sus propios intereses.
¿Cuesta dejar este hábito?
– Es un proceso muy largo, porque la primera fase es la de ocultación por parte del enfermo y de su familia. Eso siempre retrasa el inicio de una posible recuperación.
¿Acuden a ustedes los enfermos por propia voluntad?
– A la asociación vienen cuando el problema está muy avanzado. Están deterioradas sus relaciones conyugales, familiares, de trabajo, de amistad; así que el problema es tan gordo que ya no tiene otra solución.
¿Cómo actúa su entidad?
– La asociación les ayuda porque aquí todos somos iguales. Tenemos la misma experiencia, así que nuestro principal valor es la confianza en el grupo.
¿Cuántas asociaciones hay en La Rioja?
– Hay tres asociaciones, dos en Logroño y una en Nájera. Decidimos unirnos en una federación para ser más fuertes y tener una sola voz ante la Administración.