Cuatro jóvenes cuentan como comenzaron a jugar con las drogas a los 13 y 14 años. «No queríamos ser menos que los demás, queríamos estar integrados en el grupo». Argumentos que les llevaron primero el cannabis y luegoa la cocaina, fue ella la que les hizo llamar a la puerta de Proyecto Hombre.

No percibían ningún peligro en las drogas. Para la mayoría de los jóvenes la única que conlleva riesgos, es la heroina, no las demás. Ellos forman parte del 40 por ciento de jóvenes que han conseguido salir de las drogas. Trás meses de tratamiento en Proyecto Hombre han pronunciado las palabras mágicas «Lo hemos conseguido, ya estamos preparados para prescindir de las drogas».