El secretario general del Ministerio de Sanidad y Consumo, Fernando Lamata, anunció cambios en el abordaje del problema de la alcoholemia dándole una especial importancia a la prevención de esta adicción desde el ámbito sanitario, en vez de llevar a cabo medidas «restrictivas». Asimismo, manifestó su preocupación por el aumento del consumo de alcohol entre los jóvenes españoles.

Durante la inauguración del IV Congreso de la Federación Española de Enfermos Alcohólicos y Familiares (ANDAR), que se celebra en Madrid hasta el próximo día 29, Lamata explicó que su nuevo equipo tiene previsto cambiar su «filosofía» frente al alcoholismo y otras dependencias (legales e ilegales), que ya se ha visto reflejada al trasladar el Plan Nacional sobre Drogas entre las competencias del Ministerio de Sanidad, en vez de depender del Ministerio del Interior.

«El problema de las personas que padecen dependencia del alcohol es muy complejo y requiere un abordaje multidisciplinar», destacó el secretario general de Sanidad, quien insistió en que «se van a potenciar las políticas sanitarias preventivas, de tratamiento y rehabilitación, acompañadas de medidas sociales».

Concretamente, Lamata destacó que se debe hacer frente al problema del aumento del consumo de alcohol entre los jóvenes, durante el fin de semana «superando los límites de la tolerancia». No sólo se incrementan los accidentes de tráfico y las muertes por dicho consumo, sino que es un problema que puede cronificarse.

En adultos, explicó Lamata, parece que el alcoholismo se encuentra «estabilizado», aunque según los datos de la última encuesta domiciliaria del Plan Nacional sobre Drogas se ha observado un «ligero repunte». En este sentido, insistió en que «Sanidad no debe bajar la guardia, y trabajará en conjunto con las comunidades autónomas y administraciones locales para llevar a cabo programas de educación, reinserción y favorecer ayuda psicológica».