Alejandro Márquez es el presidente de la Unión Nacional de Asociaciones SAFA, cuyo objetivo es el tratamiento y la ayuda a personas con adicciones. En Cuenca desarrollan su actividad en un centro de día y trabajan además estrechamente con la Unidad de Conductas Adictivas (UCA), que depende del Hospital Virgen de la Luz.

«Primero hacemos un diagnóstico de la enfermedad y posteriormente, podemos trazar cuál será su tratamiento para cada caso»

¿A qué se dedica SAFA?

Es una organización creada en el año 1992 y surge para dar respuesta a la necesidad concreta que había en el terreno de las drogodependencias, con el objetivo de contribuir en la solución de este problema.

Nos dedicamos al tratamiento de las conductas adictivas y también a la prevención del consumo con charlas y talleres en el ámbito escolar, familiar, entre otros. Tenemos diversos programas enfocados a diferentes ámbitos como son parejas, madres con hijos. Primero hacemos un diagnóstico de la enfermedad y posteriormente, podemos trazar cuál será su tratamiento para cada caso.

Concretamente ¿cuándo empieza esta entidad a tener peso en Cuenca?

En Cuenca empezamos el 11 de febrero de este mismo año por el parón que había producido la Asociación Luz con la que en su inicio habíamos colaborado de forma muy estrecha y desde entonces estamos nosotros gestionando el centro de día ‘El Vivero’.

¿Qué centros o instalaciones tienen en la capital conquense?

Tenemos un centro de día y trabajamos desde las 10:00 horas a las 19:00 horas y hacemos más tratamiento ambulatorio y cuando una persona necesita una comunidad terapéutica lo derivamos a Albacete, al centro que tenemos allí.

¿Y con qué profesionales cuentan?

En nuestro centro tenemos fijos trabajadores sociales y educadores sociales y los que se trasladan son médicos y psicólogos.

¿Cuántos pacientes hay en SAFA Cuenca y de qué edades?

Ahora mismo tenemos 78 personas en tratamiento con edades comprendidas desde los 18 hasta los 64.

¿Cómo se mantienen económicamente?

En algunos de los servicios tenemos concertados plazas con la Junta de Comunidades a través de la Dirección General de Salud Pública y Drogodependencias, lo que es la Fundación Sociosanitaria. En esas plazas, los pacientes derivados de las Unidades de Conductas Adictivas son pagados por la Fundación. El resto, en este momento, prácticamente es privado.

«De forma progresiva se está introduciendo la conjunción de heroína y cocaína por vía fumada»

¿Cuál es la principal adicción que presentan estas personas?

En Cuenca la problemática principal viene por el consumo de heroína, seguida del alcohol y en tercer lugar la cocaína.

¿Se podría vincular una edad a un tipo de droga?

La edad que comprende desde los 40 años en adelante son gente más vinculada al tema del consumo de heroína y alcohol. De 18 a 25 aproximadamente más el alcohol también puesto que está presente en todos los enfermos, pero con predominio del consumo de cocaína. Bien es cierto que en este grupo de 18 años en adelante, de forma progresiva se está introduciendo la conjunción de heroína y cocaína por vía fumada.

«Se están produciendo bastantes recaídas de gente que ya había superado su adicción como fruto de la situación económica que vive nuestro país»

¿Qué lleva a una persona a caer en el mundo de la droga?

Desde SAFA consideramos que son múltiples los factores que se producen para llegar a consumir la droga, pero fundamentalmente yo creo que es la falta de una educación en salud, importante aunque vivamos en la época de la comunicación y de la información creo que existe un importante desconocimiento del consumo de sustancias. Y por otra parte, en este momento se están produciendo bastantes recaídas de gente que ya había superado su adicción como fruto de la situación económica que vive nuestro país y también del desempleo.

Esto está haciendo que mucha gente recurra al consumo de alcohol sobre todo, incluso de medicamentos depresores del sistema nervioso que lo que están intentando es paliar la ansiedad que produce la situación que tenemos.

¿Cómo se supera una adicción?

Una adicción como he dicho antes es una enfermedad y como tal necesita previamente un diagnóstico del por qué se produce y se genera esa enfermedad y, en base a eso, proporcionar un programa que se adecúe a las necesidad y características de cada uno de los pacientes.

Y lo mismo con cada uno de los pacientes, porque no se puede generalizar porque entonces habría como una «automedicación». Cada uno debe tener su programa completo. Pero la cuestión está en primer lugar en el reconocimiento de la propia enfermedad. Cuando uno reconoce abiertamente que está enfermo por consumo de cualquier tipo de sustancia o por el comportamiento o conducta que se puede convertir en adicción y esa es la base para que se pueda establecer una pauta de superación de la propia enfermedad.

¿Cuánto puede alargarse un proceso hasta que se puede decir que una persona está curada?

Estamos ante una enfermedad que es crónica y recidivante, es decir, que es para toda la vida, dependiendo de tu comportamiento, como por ejemplo, la diabetes, que debes llevar un control en tu vida de comidas, de actividad física. En las conductas adictivas ocurre lo mismo: si tu llevas un ritmo de vida normal, evitas cualquier factor de riesgo, las salidas por la noche, relaciones con personas consumidoras…indudablemente, tendrás más conseguido el no volver a caer en esa enfermedad.

Lo que está claro es que una intervención te puede llevar entre 6 y 8 meses aproximadamente, inicial, pero el seguimiento tiene que ser para toda la vida.

¿Cuál es el porcentaje de éxito en la curación de un paciente?

Teniendo en cuenta que estamos ante una enfermedad que es crónica y que en cualquier momento puede existir recaídas ante cualquier circunstancia, podríamos decir que el porcentaje de éxito de las intervenciones es del 80%.

¿Cuándo se puede decir que una persona está curada, cuáles son los indicadores?

En base al enfrentamiento con las propias pruebas, es decir, tu vas exponiendo al paciente a situaciones que le pueden generar un conflicto y vas viendo la reacción ante ese problema. Por eso, nosotros no tenemos una comunidad burbuja donde apartamos y aislamos al paciente, sino que en la propia intervención que realizamos cuando está en el centro de tratamiento tenemos técnicas de exposición.

De lo que se trata es de que la gente tiene que salir, tiene que ver cómo reacciona con las herramientas que los psicólogos y psiquiatras le han proporcionado, pero tenemos que ver si realmente está consiguiendo progresos. Cuando eso se va convirtiendo en hábitos, consideramos que se le puede dar el alta terapéutica a un paciente.

«El profesional tiene que adecuar el comportamiento del propio paciente y de la familia a las necesidades y situaciones concretas»

¿Cómo puede ayudar un familiar de un enfermo a que esa persona salga adelante?

Lo primero es ponerse en contacto con un profesional, acudiendo al centro de día, por ejemplo, dándole una cita y viendo la situación y que el profesional les indique en el caso concreto cómo deberían actuar con su familiar drogodependiente. Sobre todo porque no podemos caer en los tópicos de la generalización. El profesional tiene que adecuar el comportamiento del propio paciente y de la familia a las necesidades y situaciones concretas de cada uno de ellos.

¿Y cómo puede acudir a SAFA Cuenca una persona que crea que necesita ayuda en materia de adicciones?

Acercándose directamente al centro de día y pidiendo una cita cuando quiera. En un plazo máximo de dos días se le dará esa cita con un profesional que le atenderá y le ayudará a hacer una valoración de cuál es la situación real.

El centro está situado en la calle Escultor Jamete sin número, al lado del parque de Bomberos.

«El centro de día que tenemos aquí en Cuenca es para apoyar la estrategia que la propia Unidad de Conductas Adictivas (UCA) del Hospital»

¿Trabajan conjuntamente con las Unidades específicas que tiene el Hospital Virgen de la Luz?

Sí, por supuesto. Nosotros con el sistema de Sanidad Pública a través de las Unidades de Conductas Adictivas (UCA) trabajamos siempre de forma muy estrecha. Es más, el centro de día que tenemos aquí en Cuenca es para apoyar la estrategia que la propia UCA diseña con cada uno de los pacientes cuando no necesita intervención en comunidad terapéutica. Entonces, nosotros lo que hacemos es apoyar la intervención que hacen desde esa Unidad.

¿Quiere añadir alguna cosa más?

Sí, que la Asociación SAFA en Cuenca está abierta a cualquier persona. Nos gustaría que todo el mundo pudiera conocer las instalaciones y pudiera conocer nuestra labor y también animamos a la participación de voluntarios que quieran colaborar con nuestro centro de cualquier forma, con los pacientes, con las familias. Y que estamos a disposición de todos.