«Si en el buscador de una plataforma como YouTube figurás como ‘campaña antidroga’, perdiste. Nadie que consuma va a querer ver eso: no es interpelante, no te causa nada. La cuestión no es ir en contra de las drogas, sino educar y generar conciencia», relata el estudiante de cine que hace dos años comenzó a buscar financiación para desarrollar la idea que tenía en la cabeza. Nacía aVuela: un proyecto con un objetivo similar al de muchos otros, pero con una trama y formato diferentes.

La serie web de Sebastián Adlerstein se centra en una abuela (Julia Calvo) que, en cada uno de los nueve capítulos, prueba drogas como marihuana, LSD, cocaína, éxtasis, heroína y anfetamina, entre otras. Así, durante los cinco minutos que dura cada episodio, su nieto verá el efecto momentáneo de la droga abordada pero, también, las consecuencias que acarrea su consumo a largo plazo.

«Mostré el piloto entre mis compañeros de la facultad, y todos me recalcaban que lo mejor es que no se trata de una campaña antidroga. La idea es que el espectador se identifique con la figura del nieto; es él quien va a tomar conciencia cuando ve que su abuela ya no puede salir. De alguna manera, se da cuenta de que puede hacer cualquier cosa por conseguirla, eso es lo fuerte», resume Sebastián.

Luego de ganar el Fondo Nacional de las Artes, participar en Ideame y conseguir el apoyo de la Fundación Universidad del Cine (FUC), el proyecto comenzó a crecer de la mano de personalidades como Julia Calvo y Alberto Cormillot. «Sabemos que uno de los mayores desafíos es lograr la masividad y llegar efectivamente a los chicos. Si solo tiene 300 o 500 views, no sirve. Por eso, la idea es que se rían y que la bajada de línea esté al final, mostrando las consecuencias del consumo a nivel psíquico, fisiológico y físico», recalca.

En octubre de 2015, aVuela fue uno de los ganadores de COMPROMETIDOS, el desafío organizado por Socialab, Ashoka y UNESCO que invita a jóvenes de 18 a 29 años de la Argentina, Paraguay, Uruguay y Chile a pensar y proponer ideas para hacer frente a algún desafío social de sus comunidades. Además de recibir capital semilla, atravesó un proceso de capacitación y mentoreo que nutrió de diferentes formas el proyecto. «Me sirvió para pensar el storytelling: cómo contarlo, cómo se va a lanzar y cuál es el objetivo final», cuenta Sebastián.

Con el piloto, la web, los guiones y el teaser listos, aVuela sigue avanzando y buscando financiación para lanzar en la segunda mitad del año. La idea, dice su director, es difundirla a través de canales como YouTube y la web de la serie pero, también, contemplar su transmisión en colegios. «El tema de las drogas es muy tabú: en las secundarias hay charlas de educación sexual, pero no relacionadas a las drogas. No te dicen ni qué son, ni qué mal te hacen. Solo te dicen que no hay que consumir. Mi única preocupación es poder comunicarla y que sirva para concientizar», finaliza.