PARÍS (France Presse).— Un equipo de científicos afirma que identificó un gen que aumenta la adicción de algunos jóvenes fumadores a la nicotina, en un reciente artículo divulgado en la publicación británica Tobacco Control.

Estos investigadores explican que se trata de dos variantes de un gen llamado CYP2A6, que controla las enzimas que eliminan la nicotina del hígado. Las variantes de este gen disminuyen los niveles de las enzimas, lo que significa que la nicotina es procesada más lentamente. El resultado es que el cerebro es expuesto más rápidamente a concentraciones elevadas de nicotina, dando más placer al fumador, la clave de la adicción, de acuerdo con este estudio. Científicos canadienses trabajaron sobre casi 1,300 jóvenes de 13 años en Québec.

De este total, 281 fueron identificados como fumadores. Todos ellos dieron una muestra de sangre que fue examinada en busca del gen CYP2A6 y de sus variantes. En un examen efectuado 30 meses más tarde, 30% de los 281 jóvenes se habían vuelto dependientes de los cigarrillos. Los que tenían variantes CYP2A6 tenían casi el triple de probabilidades de volverse adictos que los que mostraban la forma regular del gen. Los autores de este estudio, efectuado bajo la dirección de Jennifer O»Loughlin, una experta en epidemiología de la Universidad McGill, creen que este descubrimiento permitirá explicar por qué algunos jóvenes se habitúan tan rápidamente a fumar, superando los mareos y las náuseas iniciales ocasionados por la nicotina. “Los adolescentes con las variantes CYP2A6 corren un riesgo mucho mayor de volverse dependientes, pero fuman menos una vez que se vuelven dependientes”, dicen los científicos.

“El riesgo genético de dependencia de la nicotina tendría que ser tomado en cuenta cuando se preparan los programas de control para los adolescentes”, señalan. De acuerdo con un estudio publicado también el miércoles en Tobacco Control que amplía el resultado de investigaciones difundidas en septiembre de 2003, fumar mata a unos cinco millones de personas por año.

Las mujeres que fuman y los fumadores en los países en vías de desarrollo constituyen los grupos más vulnerables.