El alcohol está muy presente en la sociedad. Tal vez no nos demos cuenta, pero en cada reunión social, en cada celebración, en cada uno de los momentos que asociamos al ocio o a la diversión hay una botella de vino, unas cañitas o una copa de champán. En las reuniones con los amigos para tomar el aperitivo, en las cenas de Navidad, en las bodas… El alcohol es también el protagonista de las fiestas de los pueblos, que todos esperamos con tantas ganas y que copan la agenda de jóvenes y no tan jóvenes durante el verano. Nos acompaña en los buenos momentos, pero también en los malos. Porque si te deja el novio o la novia, pues también sales a ahogar las penas con los amigos.

Quienes sí se dan cuenta del protagonismo que el alcohol tiene en la sociedad son las personas que tratan de salir del infierno que supone la adicción a esta sustancia. En Palencia, la Asociación de Alcohólicos Rehabilitados de Palencia (Arpa) es su apoyo fundamental, junto con el de sus familias. Hasta su sede acudieron el año pasado 141 personas, de las cuales 69 eran nuevos pacientes, que acudieron hasta allí por primera vez para pedir ayuda. El resto de esta cifra lo componen aquellos que ya habían empezado la terapia y continúan con su rehabilitación.

Durante los últimos años, el número de mujeres que acuden a pedir ayuda para superar su alcoholismo se ha incrementado. En la actualidad son 20 las afectadas que participan en las terapias de Arpa.Quienes trabajan en este tipo de terapias afirman que el aumento de mujeres alcohólicas tiene también que ver con la integración de esta en la sociedad y en el mundo laboral. Antes las mujeres no iban mucho a los bares, o no hacían botellón. «Los patrones de consumo se han ido igualando, y eso ha influido en el crecimiento de los casos de mujeres con este problema», afirma Angélica Pastor, trabajadora social en Arpa. Esto dificulta que comuniquen su adicción a sus familiares o a las personas más allegadas. «La mayoría de mujeres que vienen por primera vez lo hacen solas. Muchas duran poco en el tratamiento, porque al primer momento que flojean, abandonan la terapia. No tienen un apoyo detrás que les aliente, y eso es algo fundamental en este proceso», explica Angélica Pastor. A las mujeres les resulta mucho más difícil reconocer públicamente que tienen un problema con el alcohol. «Todavía persiste el estigma de que al hombre, cuando bebe, se le ha ido la cosa de las manos, pero nosotras somos unas borrachas», afirma una de las mujeres que acuden a la terapia. «Se cree que el alcoholismo es una enfermedad mayoritariamente masculina», afirma Angélica. «Todavía seguimos viendo peor que una mujer tenga un problema con el alcohol, y esto hace que sea muy difícil que aquellas que lo sufren vengan a la terapia», afirma. «Para mí, las mujeres que dan este paso son verdaderas heroínas, porque muchas se enfrentan solas a su problema». Y es que el perfil de la mujer alcohólica es diferente al del hombre. Ellos suelen beber en el bar, acompañados, son bebedores sociales. Ellas suelen tomar alcohol para refugiarse de problemas personales, y lo hacen en casa, solas, a escondidas, porque se avergüenzan más si cabe. Por eso es fundamental el apoyo de las familias. En Arpa, los familiares de los enfermos juegan un papel muy importante en el proceso de recuperación. Además, acudir a las sesiones también les ayuda a ellos, que aprenden a comportarse y a reaccionar ante estos problemas y, sobre todo, no se sienten solos. Arpa desarrolla terapias mixtas a las que acuden los enfermos con sus familiares. Allí, guiados por la trabajadora social, todos hablan sin tapujos y comparten sus experiencias, su sufrimiento, todo aquello por lo que han pasado. Aprenden unos de los otros cómo emprender una vida sin alcohol, y se apoyan mutuamente. Y es que ellos mismos lo dicen. «Esto es como una gran familia. Todos nos sentimos responsables del otro, y estamos ahí para ayudarle en lo que necesite», afirma uno de ellos.

ARPA

Teléfono. 979728958
Sede. Avenida San Telmo 12. Palencia.
Horario. De lunes a viernes. De 10 a 13h y de 18 a 20 horas.
Terapias. Los martes y viernes, terapia de enfermos. Los miércoles, terapia de familiares, y los jueves, terapia de iniciados.
Otras actividades. Durante todo el año se realizan talleres, excursiones y charlas.