La Federación Comarcal de Coordinadoras contra las drogas del Campo de Gibraltar Alternativas impulsó la reinserción laboral de 60 toxicómanos a lo largo del pasado año. Ése ha sido uno de los principales logros que dejó en el seno de la federación el año 2002, según el copresidente de la misma, Francisco Mena. Dos talleres de empleo respaldados por el Instituto Nacional de Empleo (Inem) han dado cabida a sesenta toxicómanos totalmente reinsertados “que han aprendido una profesión con nosotros”. A lo largo de este período de aprendizaje desarrollaron actividades como carpintería, albañilería y pintura. Los resultados; “el salón multiusos de la comunidad terapéutica Montenegral y el arreglo de guarderías”. La inserción laboral ha sido siempre una de las “grandes preocupaciones” de Alternativas y un campo en el que “se ha hecho menos”. Mena recuerda que “no puede haber una inserción social plena si no hay una inserción laboral” y ello ayuda a trabajar no sólo en el ámbito profesional, sino también en el personal. “Se ha hecho un buen trabajo y ahí están los frutos”, explica. Según sus datos, “el 60% de ellos está trabajando”.

Prevención

El balance anual ha sido muy positivo en líneas generales y, aunque siempre quedan capítulos por cerrar, una de las facetas que más se consolidó en 2002 fue la de la oferta educativa escolar, que contó con la participación de 3.000 niños. “La oferta educativa se hizo por primera vez en 2001 y se ha asentado con una demanda importante. Sobre todo, por parte de los colegios, lo que nos parece muy interesante”, manifiesta.

Otro programa dedicado a los pequeños ha sido la oferta de ocio y tiempo libre. En ella participaron más de 1.000 niños fuera del horario escolar, así como en las escuelas de verano que funcionaron en San Roque, Los Barrios, Castellar y Jimena de la Frontera, que también nacieron en 2001 y que este año dieron cabida a 500 niños.

Mena también destacó el trabajo que se ha seguido realizando con los adolescentes. “Hemos trabajado con jóvenes en institutos de secundaria de Jimena, Tesorillo, Guadiaro, Castellar, San Roque, Estación de San Roque”. En este programa participaron 2.000 jóvenes, por lo que entiende que en materia de prevención los resultados han sido muy positivos. Cada año, Alternativas realiza un sondeo entre los jóvenes para conocer cuáles son los temas que más les interesan. El sexo y las drogas fueron los más solicitados. Por ello, el responsable explica que este hecho pone de manifiesto que aunque “vamos de progres por la vida y parece que la barrera generacional se ha roto entre padres e hijos, no es cierto”. Cree que “los niños hablan poco de sexo en sus casas y además, la información que tienen es muy sesgada”. Para Mena ésta fue una labor “gratificante” ya que supuso un modo de orientarse para seguir trabajando.

En cuanto a la formación y el empleo el portavoz recordó que este año 200 jóvenes participaron en los doce cursos de formación ocupacional que se centraron en gamas tan variadas como la cerámica, la jardinería, la informática o la gestión empresarial. Este programa se llevó a cabo contando con la colaboración de la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico “que hizo una apuesta muy importante por nosotros”, culminó.

“La comarca necesita un plan especial contra la droga”

Alternativas también ha escrito ya su particular carta a los Reyes Magos. En primer lugar, Francisco Mena destacó que, para este año 2003, reivindicarán ante todo que “de una vez por todas se haga la Comisaría de Algeciras, porque entendemos que ya tenía que estar hecha y a fecha de hoy aún no esté. Dudo que vaya a estar en 2003, pero al menos espero que la comiencen”. Otra de las peticiones que realizó el responsable es la ejecución del Centro Comarcal de Drogodependencias de Algeciras que estará ubicado en la barriada de El Saladillo y que -dijo- “también hace mucha falta y llevamos mucho tiempo esperándolo”. Recordó que el Centro de Prevención de Drogodependencias de Algeciras es uno de los que más drogodependientes trata en la provincia de Cádiz. Aunque mejoraron las condiciones laborales de los profesionales al pasar al antiguo asilo “hace falta que se les deje un nuevo local y esperamos que para este año esté terminado”. Subrayó que estos dos asuntos son esenciales. Sin embargo, hizo hincapié en la necesidad de un plan especial de lucha contra la droga para la comarca. “No vale el parcheo que se está haciendo. Ya hicimos, después de una reunión con los diputados Salvador de la Encina y Carmen Romero, un llamamiento que fue una propuesta no de ley en el Parlamento”. Para Mena, las acciones contra la droga en el Campo de Gibraltar no se pueden reducir a decir a final de año “que se han cogido cuatro mil kilos de hachís”. Cree que “la lucha contra la droga tiene que ser más importante, contar con suficientes medios para la Guardia Civil y la detección en el blanqueo de capitales”. A su juicio estas mejoras deben ir acompañadas de medidas sociales y laborales. Por último invitó a “los comisarios que vienen al Campo de Gibraltar, que duren un poquito más”.

De cara al nuevo ejercicio, Mena destacó que la actividad estará marcada por la inyección económica de la entidad La Caixa, que se ha comprometido a financiar el “programa de trabajo” en el Centro Penitenciario, concluyó.

Brillante labor del agente de desarrollo local

La inserción laboral del toxicómano es una de las claves en la lucha contra la droga que mantiene Alternativas. Sin embargo, para ello es necesario contar con el apoyo de las administraciones. Y, en este sentido, para Francisco Mena ésta es la parte “menos positiva”. A través de los planes de empleo, se insertaron cuatro drogodependientes y esperan que en el próximo plan (que saldrá a principios de este año) se puedan insertar al menos ocho. “Si desde el movimiento asociativo no le damos oportunidad al drogodependiente nadie lo hace”, afirma. Explica que el drogodependiente “que sale del mundo de la droga se queda etiquetado, en su barrio, en su entorno y eso lo marca mucho”. El toxicómano pierde una parte de su vida mientras otras personas se dedican a formarse “y luego encuentra que tiene muchas carencias”.

Por último, quiso destacar la rentabilidad social de la empresa de inserción, y la labor del agente de desarrollo local (sujeto a convenio con la Mancomunidad de Municipios) que trabaja con personas en riesgo de exclusión social y que ha posibilitado un total de 80 inserciones en 2002.