LA LINEA. Doscientos menores participan en el programa de educación preventiva sobre drogas para adolescentes puesta en marcha por la delegación de Asuntos Sociales en los colegios de la ciudad.Los organizadores de esta iniciativa tienen claro que la drogodependencia es un problema que genera una gran preocupación social. Por ello, la concejalía de Asuntos Sociales y Políticas de Igualdad, en coordinación con otros agentes sociales, busca soluciones desde muy diversas perspectivas. Existe, asimismo, un acuerdo unánime en que la prevención es un elemento clave para afrontar este problema y en que la escuela, en colaboración con las familias y con otras instituciones es, entre otros, un ámbito idóneo para llevarla a cabo. «Dado que la drogodependencia está directamente relacionada con la situación educativa de las personas, la mejor prevención es una educación que promueva la competencia individual y social de los menores. A través de la puesta en marcha de este programa pretendemos una intervención socioeducativa sobre la población preadolescente, con el objeto de que estos interioricen un estilo de vida saludable, fomentando valores que favorezcan la madurez personal y proporcionando una información adecuada que atienda a las características de esta población», dijo el concejal Gabriel Gonzálvez.
El programa está dirigido al alumnado preadolescente que finaliza Primaria y se enmarca en el ámbito de la educación en valores en general y en el de la educación para la salud en particular. Este programa, que se inició el pasado curso con 124 menores, obtuvo notables resultados en cuanto a la participación y de la continuidad educativa implicada. «Por ello, durante el presente curso se ha ampliado la participación, que sobrepasará los 200 escolares, así como sus familias y, al igual que en el pasado curso, se seguirá llevando a cabo en los centros escolares de enseñanza Primaria de las barriadas de La Atunara y de Los Junquillos».
Su aplicación se llevará a cabo mediante la integración curricular y supondrá un trabajó individual y grupal con los menores, así como la actuación con 105 padres y tutores, constituyéndose estos aspectos en los dos ejes centrales de la intervención.
Por último, se reseña desde la concejalía la importancia que adquiere para el buen funcionamiento del programa y así como para el logro de los objetivos la colaboración de los equipos educativos de los centros adscritos.
