Parece ser que el 11 de septiembre viene siendo responsable de muchas cosas, entre ellas el desabastecimiento de heroína y el aumento de su precio en el mercado negro español anunciado ayer por el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Gonzalo Robles. Dicha afirmación ha cogido por sorpresa al propio director general de Atención a las Drogodependencias, Rafael de Saja, quien ha confirmado, al igual que la Asociación Gandhi, que la situación en Canarias es normal. No obstante, somos la única región que cuenta con un dispositivo especial para atender a drogodependientes en episodios de ausencia de heroína, que en dos años se ha activado cuatro veces, todas en Lanzarote.

Canarias es la única comunidad del Estado que cuenta con un dispositivo de emergencia de dispensación de metadona para episodios de ausencia de heroína en el mercado negro en el Archipiélago. Desde que se puso en marcha, hace dos años, con la primera crisis de estas características, se ha activado cuatro veces, y todas en Lanzarote, siendo la última hace apenas unas semanas, coincidiendo con las fiestas de Carnavales, según la información facilitada por el director general de Atención a las Drogodependencias del Gobierno canario, Rafael de Saja.

«Se trata de un dispositivo preparado para intervenir a las dos horas de recibir la voz de alarma. Es un proceso extraordinario, no es un dispositivo de tratamiento porque se deriva de que no hay heroína en la calle y hay que dar metadona porque si no lo hacemos el caos en los servicios de urgencia es terrible. Se ha activado cuatro veces, la primera nos pilló por sorpresa y el resto se activó desde el primer síntoma», afirma De Saja.

En el proyecto intervienen, además de la Dirección General de Drogodependencias, el Cabildo de Lanzarote, el Servicio Canario de Salud, Cruz Roja y la Delegación del Gobierno.

No son usuario del CAD

«Las personas que acuden no son las que voluntariamente demandan un tratamiento, es decir usuarios de un CAD (centro de atención a drogodependientes), que no es un centro de suministro de metadona, aunque algunos de los que han sido atendidos en el dispositivo de emergencia se han incorporado a los programas ordinarios de tratamiento del CAD, pero la verdad es que son muy pocos», dice el director de Drogodependencias.

En las cuatro veces que se ha activado dicho dispositivo, se ha atendido una media diaria de 250 personas. La eventualidad del mismo es de unos cinco días aproximadamente, aunque el proceso en su conjunto tiene una duración aproximada de 20 días.

«No se puede quitar de golpe porque la metadona es un opiáceo, pero es una sustancia que tiene distintas características que la heroína. Además, tratamos de estimular la voluntariedad en el tratamiento, y éste se mantiene, al menos, por tres semanas, aunque desde que comienza a haber heroína en el mercado va descendiendo la demanda», afirma De Saja, quien hace hincapié en que «en el CAD nunca se dispensará metadona de esta forma porque es un centro donde se presta atención sanitaria a aquéllos que voluntariamente se sometan a ello, no se pueden mezclar dispositivos de emergencia con programas de tratamiento», añade.

El dispositivo de emergencia se activa tras recibir la voz de alerta del Servicio Canario de Salud, el primero en detectar el problema de ausencia de heroína con la aparición de enfermos con síndrome de abstinencia, y la metadona se dispensa en los locales de Cruz Roja, contando para ello con voluntarios de la propia ONG, personal del SCS y personal del CAD de Lanzarote, desde donde se refuerzan los sistemas de analítica y control.

El hecho de que este dispositivo se haya llevado a cabo siempre en Lanzarote puede estar relacionado, según el director de Drogodependencias, con el modelo de mercado de heroína de la Isla, «porque estas carencias no ocurren por casualidad y, aunque confieso que nos faltan datos, probablemente sea porque no es un mercado muy plural, y como en todo, cuando el distribuidor en exclusiva pega el cerrojazo, desaparece el producto», dice De Saja, añadiendo que en Lanzarote hay mucha población foránea, «y el repunte de consumo de ese tipo de población es diferente del resto de la Comunidad Autónoma. Hay otra realidad que también ocurre en Lanzarote, y excepto en la última ocasión, siempre ha coincidido la ausencia de heroína en el mercado con la ocupación de la casa real de la Mareta por un alto dignatario, español o extranjero. A lo mejor puede estar relacionado con que dichas visitas vienen acompañadas de medidas extraordinarias de protección y una mayor presencia policial pueda inhibir», concluye De Saja.

Gandhi no detecta cambios en el patrón de consumo

En Gran Canaria no se ha notado, hasta el momento, un cambio en el patrón habitual del consumo de heroína, según la información facilitada por Nena del Rosario, responsable de la Asociación grancanaria de Atención a las Drogodependencias, Gandhi, que atiende actualmente tres CAD (Centro de Atención a las Drogodependencias) y una unidad móvil de metadona, además de los diferentes programas que desarrolla.

Del Rosario asegura: «Hasta el día de hoy no hemos notado ningún cambio en el consumo, no ha subido el número de demanda de metadona, ni nos han comunicado que haya aumentado el valor de las dosis de heroína o restricciones en el mercado», dice la presidenta de Gandhi.

Del Rosario añade que en cuanto a la adulteración de la heroína tampoco se puede hablar de cambio, «ya que la adulteración siempre existe, hasta el mismo vendedor ya la da adulterada, y esto sigue igual», concluye.

Robles asegura que la guerra de Afganistán ha triplicado el precio de la heroína en España

La guerra en Afganistán, el mayor productor de heroína de Europa, y el control de las rutas para su distribución se han traducido en un desabastecimiento que ha triplicado el precio de la droga en España, donde los centros de tratamiento están en alerta desde hace 15 días, según apuntó ayer el Delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Gonzalo Robles, durante la presentación del último informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes.

Robles aseguró que hace 15 días se puso en alerta a esos centros, especialmente a los de Madrid, sobre el probable aumento de precio debido al desabastecimiento y su consecuente adulteración. Ya han constatado, dijo, un aumento de la demanda de metadona, la droga sustitutiva de los opiáceos. «Las cosas se están manejando con prudencia, pero sin alarma», dijo Robles, quien aseguró que, por los datos que manejan, el precio se ha triplicado porque «los grupos kurdos, por la situación de extrema vigilancia de la zona, están muy castigados y les cuesta mucho llegar con la droga», dijo.

En el segundo semestre del año pasado, la dosis de heroína, es decir, 111 miligramos, tenía un 24% de pureza y costaba en la calle 1.524 pesetas. La pureza del gramo subía entonces a un 33% y la del kilo, valorado en 7.024.161 pesetas, a un 50%. Acerca de la pureza, el plan no dispone aún de datos fiables, pero sí ha podido constatar, a partir del testimonio de los drogodependientes que el precio se ha triplicado.