Desde que el pasado 14 de septiembre Elena Salgado anunciara en el Congreso la situación sobre el consumo de drogas en nuestro país y se concluyera sobre la imperante necesidad de articular medidas de prevención y acción sobre esta realidad, la Comisión Mixta Congreso-Senado para el estudio del problema de las drogas ha arrojado ya sus conclusiones.

Según los datos de la Encuesta Domiciliaria sobre abuso de drogas en España, entre 1999 y 2003 ha aumentado el número de personas de 15 a 64 años que consumen alcohol, hipnosedantes sin receta médica, cocaína y cannabis. Se mantienen en proporciones similares a las de 1999 el consumo de éxtasis, anfetaminas, alucinógenos e inhalables volátiles. Tan sólo se constata una disminución en el número de consumidores de heroína, sobre todo en el número de los que lo hacen por vía inyectada.

Por otra parte, y en lo que afecta a la población más joven, la Encuesta sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias, es decir entre jóvenes de 14 a 18 años, muestra un incremento muy importante del consumo de cannabis y cocaína entre 1998 y 2004.

Igualmente cabe señalar que no ha variado sustancialmente la edad de inicio de consumo de alcohol entre esta población escolar, e incluso ha descendido en el consumo de cannabis, que está por debajo de los 15 años.

Hay que destacar también que ha disminuido la percepción del riesgo, sobre todo hacia el alcohol y el cannabis, y que ha aumentado la percepción de la accesibilidad a las drogas por parte de estos adolescentes y jóvenes.

En consonancia con lo anterior, aumenta el número de personas que acuden a centros de tratamiento por consumo de cocaína y cannabis, descendiendo el de los que lo hacen por consumo de heroína.

También han aumentado en los últimos años los ingresos hospitalarios por psicosis alcohólica, por síndrome de dependencia al alcohol y por psicosis causadas por otras drogas. La Encuesta de Morbilidad Hospitalaria muestra un incremento, entre 1993 y 2002, de los ingresos hospitalarios por psicosis ocasionadas por consumos de drogas del 420%, dato preocupante aunque las cifras absolutas no sean muy grandes.

La ministra destacó que estas tendencias en el consumo de drogas no son exclusivas de España sino que nuestro país muestra una consonancia muy importante con las cifras reflejadas en países del resto de Europa.

Medidas de Acción

Por esta razón la Estrategia Nacional sobre Drogas debe buscar el impulso para avanzar en la erradicación de esta gran lacra social que cada vez afecta a más de nuestros jóvenes. Los pilares fundamentales de este Plan de Acción son: la prevención del consumo de sustancias psicoactivas, sobre todo entre los más jóvenes, mejorar la capacidad del sistema para diagnosticar y tratar precozmente este problema, disminuir el daño en las personas consumidoras, y potenciar la integración social y laboral de los antiguos consumidores.

El Plan, cuyo horizonte de ejecución es el período 2005-2008, incorpora un amplio conjunto de acciones que se estructuran en torno a seis grandes ejes de actuación: la Coordinación, la Prevención y Sensibilización, la Atención Integral, la Mejora del Conocimiento, la Reducción de la Oferta y, finalmente, la Cooperación Internacional. Dentro de estos seis grandes ejes, las medidas abarcan las principales áreas de intervención en drogodependencias.

La Ministra también destacó el espíritu de colaboración, cooperación y entendimiento que ha existido entre las diferentes administraciones autonómicas y la sintonía con la Estrategia Europea sobre Drogas 2005-2012. El Plan de Acción se convierte de esta manera en una Hoja de Ruta de la que se esperan resultados en los próximos 4 años.