La Comisión Europea adoptó ayer una propuesta de recomendación del Consejo sobre prevención del tabaquismo en la que insta a los Quince a impedir que la publicidad o promoción de productos relacionados con el tabaco esté dirigida a menores.

La propuesta, que será estudiada por el Consejo de Ministros de Sanidad el próximo 26 de junio, invita a los gobiernos nacionales a que «adopten medidas» para que ciertos tipos de publicidad o
promoción de tabaco dejen de tener a esta población como consumidor objetivo.

En un comunicado, Bruselas cita el uso de marcas de cigarrillos en mercancías, ropa o servicios no relacionados con el tabaco, la distribución de objetos promocionales, el uso de pósters y carteles o los anuncios en salas de cine, como ejemplos de las prácticas a eliminar.

Además, la Comisión propone una serie de medidas destinadas a «reducir la oferta» de productos del tabaco al alcance de menores. Aboga así por restringir el acceso de niños y adolescentes a maquinas expendedoras de tabaco y a los servicios de venta de tabaco a distancia y por Internet.

Asimismo, apuesta por prohibir la presencia del tabaco en los mostradores de autoservicios, por prevenir la venta de cigarrillos en cantidades menores a las veinte unidades y por exigir a los
vendedores que comprueben la mayoría de edad de sus clientes. En la misma línea, el reglamento propuesto invita a los Estados miembros a obligar a las empresas tabaqueras a declarar sus gastos en
publicidad, marketing, patronazgo y campañas de promoción.

También apuesta por que la industria participe en las campañas contra el tabaquismo y en la búsqueda de «una protección apropiada» contra el tabaquismo pasivo en los lugares de trabajo, los sitios públicos cerrados y el transporte público.