El Ministerio de Sanidad anunció ayer que impulsará el Plan Nacional contra el Tabaquismo, que incluye medidas para prevenir las adicciones entre los jóvenes y potenciar los «espacios sin humo». El departamento que dirige Celia Villalobos prevé aprobar antes de fin de año este proyecto, que prohibirá la venta de tabaco a los menores de 18 años y el consumo en centros de trabajo docentes, sanitarios, públicos y de ocio.

«La normativa sobre los lugares públicos donde fumar ha quedado desfasada. Estamos estudiando ampliarlos», anunció el doctor Javier Rubio, técnico de la Dirección General de Salud Pública, en la presentación de la 23 Campaña sin Humo, en más de 600 centros de salud y hospitales, lanzada ayer por la Sociedad Española de Medicina de Salud y Comunitaria (SemFYC).

Bajo el lema Sin humo lo verás más claro, la campaña persigue implicar a los médicos de atención primaria en la lucha contra el tabaquismo. Sus reponsables calcularon que el consejo médico llevaría a 300.000 españoles a dejar el tabaco cada año.

VETO DE LA PUBLICIDAD

El objetivo del plan es reducir el número de fumadores (actualmente consumen tabaco el 35% de los españoles) con iniciativas para retrasar la edad de inicio y facilitar el abandono del hábito. No está claro si el plan prohibirá totalmente la publicidad, aunque el borrador aboga por hacerlo.

Las muertes asociadas al consumo de tabaco han pasado de 46.000 en 1992 a 56.000 en 1999, según los últimos datos aportados por el Ministerio de Sanidad. Los expertos atribuyen este aumento al incremento de fumadores que hubo hace décadas, ya que las consecuencias de fumar se notan años después de comenzar con el hábito. El tabaco es actualmente el responsable directo del 14% de las muertes y del 30% de los fallecimientos ocurridos entre los 30 y los 69 años.

SIN PRESIONES

Según el doctor Francisco Camarelles, responsable de actividades preventivas de la SemFYC, el 90% de los fumadores muestran una clara dependencia del tabaco y dos tercios confiesan dificultades para dejarlo.

Camarelles alertó de que la adicción al tabaco resta entre 10 y 20 años de vida. También recordó que la mitad de adolescentes que empiecen a fumar y no abandonen este hábito morirán por alguna enfermedad relacionada con la adicción.