Dos días intensos de dialogo entre profesionales de la salud, personas expertas, activistas y pacientes en los que desde posiciones diversas se han destacado los aspectos beneficiosos de los tratamientos a partir del cannabis.
Redacción – Acaba de cerrar la tercera edición del Congreso de Cannabmed, organizada por ICEERS junto con el Col·legi de Farmacèutics de Barcelona (COFB) y la Unión de Pacientes por la Regulación del Cánnabis (UPRC), después de dos jornadas intensas. La primera dirigida a profesionales de la salud desde el Col·legi de Farmacèutics de Barcelona y la segunda dirigida a público general desde la sede de ICEERS.
La pandemia obligó a posponer la tercera edición de este congreso que, aunque ha tenido que ser retransmitida online, ha contado con más de 700 participantes.
Bajo el título de Hacia una farmacopea Europea, el congreso ha contado con un total de 6 mesas en las que se han tratado temas como la situación actual y dificultades de acceso en tiempo de COVID-19, los avances científicos del potencial terapéutico, la dosificación y vías de administración y las oportunidades de los cannabinoides, entre otros.
Entre las muchas aportaciones interesantes, se destacaron las limitaciones del autocultivo en relación con el tratamiento de dolencias, subrayando que aunque puede ser útil en muchos casos y mejor al mercado negro, algunas dolencias potencialmente tratables con cannabis solo lo serían desde la industria farmacéutica por su capacidad de reducir la variabilidad en la composición y, por tanto, efecto.
Cabe destacar la aportación de Mireia Ventura, directora de los servicios de análisis de Energy Control, que explicó que han observado en sus análisis una progresiva disminución del THC en favor del CBD en los últimos años.
Además de profesionales del ámbito de la salud, el congreso ha contado con la presencia de activistas del movimiento cannábico que relataron los problemas represivos a los que se enfrentan las personas del movimiento cannábico, como es el caso de Albert Tió condenado a 5 años de prisión.
Cannabmed ha contado con representación del mundo de la política. Lucia Muñoz de Podemos, entrevistada por Constanza Sánchez, directora de Leyes y Políticas en ICEERS, ha hablado sobre la posición del partido y los efectos económicos de una potencial regulación del cannabis.
Sobre política, Oscar Parés, subdirector de ICEERs, señaló la paradoja de la situación en España donde no se permite el cannabis medicinal pero se otorgan licencias para su cultivo y exportación.
Queralt Prat, presidenta de la UPRC destacó que el volumen de evidencia sólida sobre los beneficios de cannabis revela que se trata de un problema político y situó el reto en el modelo de regulación, pidiendo que se centrara en las personas y pacientes en vez de a las grandes empresas.
El congreso remarcó en sus conclusiones la necesidad definir un marco de colaboración entre todos los actores interesados para avanzar en la regulación del uso medicinal del cannabis.