El servicio de Otorrinolaringología del Hospital General Universitario de Elche ha registrado en los últimos quince años un progresivo e imparable aumento en el número de casos de cáncer de laringe en mujeres. Así lo manifiesta el jefe de esta unidad, el doctor Eloy Infante Matarredona, quien achaca este incremento al cambio de hábitos en las mujeres, sobre todo en lo referente al consumo de alcohol y tabaco.

El doctor Infante, quien dirige un servicio que se creó al mismo tiempo que el hospital, hace más de 25 años, recuerda que hace unos 15 años se consideraba «raro» detectar un cáncer de laringe en una mujer. Es más, el especialista apunta que «antes se publicaban los casos en revistas especializadas, porque era muy difícil ver un caso, todo lo que ahora es ya habitual». El médico entiende que el porcentaje sigue siendo considerablemente menor que en los hombres, pero advierte que la patología va en aumento en las féminas en los últimos años.

El jefe del Servicio de Otorrinolaringología del hospital ilicitano es optimista con la evolución del tratamiento del cáncer de laringe. En 1991, el centro sanitario se convirtió en el primero de la Comunidad Valenciana en introducir la cirugía láser para las operaciones de tumores en este órgano. «Esta técnica es mucho menos agresiva, pues no es necesario abrir, se accede al tumor por vías naturales. Además, si el cáncer se detecta y diagnostica a tiempo, la curación está en torno al 90 por ciento, pudiendo ser superior en algunos casos», apunta el doctor Infante Matarredona.

Las causas más comunes de la enfermedad son, como antes se ha citado, el alcohol y el tabaco. «La mezcla de ambas es lo peor», señala el jefe del servicio. Y el primer síntoma de la enfermedad en la laringe es «un cambio de voz para el que no se encuentra una justificación. Es la primera circunstancia que debe alarmar, cuando se ha pasado un catarro y la voz sigue siendo ronca o distinta», señala el especialista.
Una de las «rarezas» o virtudes del servicio es la inexistencia de listas de espera, tanto en las consultas externas como en el quirófano. Así lo afirma el jefe del área.
El equipo médico del servicio está formado por diez facultativos, «que tenemos tiempo para tratar a los pacientes, para poco más», apunta el especialista cuando se le pregunta sobre si realizan proyectos de investigación. El servicio atiende las enfermedades de la garganta, la nariz, cabeza y cuello. En estas dos partes se suelen dar casos de tumores y enfermedades del tiroides o las paratiroides.

Uno de los principales quebraderos de cabeza de los médicos del servicio es la falta de espacio, tal y como ocurre en la mayoría de las áreas del hospital ilicitano. A pesar de ello, el centro sanitario es de los pocos hospitales de la Comunidad Valenciana en donde se están operando los tumores en tiroides y el único de la provincia donde se operan las paratiroides con implantes.

Dentro de la actividad del servicio se encuentra la formación de especialistas y en los últimos años se está impartiendo un curso de cirugía del tiroides.