A requerimiento del Gobierno sueco, la Comisión Europea informó ayer, 12 de mayo, con motivo de la reunión del Ecofin, de que en breve concluirá el informe en torno el sistema impositivo sobre el consumo de bebidas alcohólicas.

Aunque el Ejecutivo de Bruselas no quiso profundizar sobre los puntos y conclusiones que formarán parte de este documento, sí que apuntó a que se expondrá ante la Eurocámara la necesidad de debatir la introducción de cambios en el actual sistema que grava las bebidas alcohólicas en la UE, en relación a los tipos mínimos aplicados.

En otro orden de cosas, los ministros de Economía y Finanzas de la UE ampliada alcanzaron un acuerdo político en torno a la propuesta de una nueva Directiva que permita a la Unión dar una respuesta más ágil a la evolución constante del sistema financiero. La adopción formal de la nueva norma no se producirá hasta el próximo otoño, una vez se haya traducido a las 20 lenguas oficiales.

Una vez aprobada, seis decisiones de la Comisión entrarán en vigor, formando un paquete normativo que dibujará una estructura moderna en la toma de decisiones relativas a los servicios financieros.