La intervención judicial en dos casos provocados por menores de edad de Vilagarcía con problemas de adicción a las drogas que maltrataban habitualmente a miembros de su familia ha hecho saltar todas las alarmas. Ayer, la directora del Servicio de Prevención y Asistencia al Drogodependiente (SPAD), Mar Lojo, advertía que muchos adolescentes no son conscientes de los efectos que les producen las drogas, al tiempo que advertía del «incremento de los casos de violencia doméstica» protagonizada por estos jóvenes.
Mar Lojo declaró a Europa Press que «las familias permiten la incorporación a edades cada vez más tempranas de los jóvenes a la vida social» (salidas nocturnas, discotecas). El hecho de que algunas drogas de diseño, e incluso las clásicas, puedan adquirirse por sólo diez euros incita a los jóvenes «a consumir más pronto y a que no se den cuenta de la dependencia que tienen de las drogas».
Lojo destacó también que la tendencia actual deriva al policonsumo de varias sustancias estimulantes lo que provoca situaciones de tensión, también en el ámbito familiar.
Desde la Fundación contra o Narcotráfico de Galicia apuntan a la facilidad para encontrar estupefacientes en cualquier sitio, lo que facilita que los jóvenes se inicien en su consumo con facilidad.
La dirección del SPAD viene alertando desde hace algunos meses del paulatino aumento de consumo de cocaína en Arousa, cuyo repunte se nutre de «jóvenes consumidores de fin de semana». Las dorgas estimulantes y de síntesis presentan también un aumento paulatino, aunque su ritmo de crecimiento es menor, pese a que suele ser en la época estival cuando el consumo toca techo. Al respecto, Lojo reclama una mayor intervención policial y mayor control durante el verano.
El SPAD de Vilagarcía organiza campañas de prevención para evitar el consumo de drogas entre los más jóvenes y se dirige tanto al ámbito comunitario, como al escolar y familiar, en colaboración con el SPAD de O Grove.
Preocupación por las jeringuillas en monte do Bolo
En Noia también existe preocupación relacionada con el mundo de la droga aunque por otro motivo. Los vecinos están hartos y cansados de los destrozos que supuestos toxicómanos causan en el parque del monte do Bolo. Desde hace años este lugar de esparcimiento es el lugar elegido para el trapicheo y consumo de drogas ante la falta de vigilancia y por tratarse de un lugar que, pese a que está dentro del casco urbano, se sitúa en una zona tranquila y poco transitada por la noche. En este área se hallan jeringuillas esparcidas por el suelo con el consiguiente riesgo de contraer una enfermedad para las personas que puedan frecuentarla.
El alcalde de Noia, Antonio Pérez Insua, anunció que mañana mismo las brigadas de medio ambiente del ayuntamiento procederán a limpiar el monte do Bolo. Asimismo, afirmó que dará instrucciones a la Policía Local para que frecuente más la zona a fin de que se utilice como un área de esparcimiento y recreo y no para el consumo de drogas.
También informó de que se va a limpiar el patio de la casa de la Fundación Blanco Monroy, situada en el centro de la localidad, que en la actualidad se encuentra lleno de maleza. Dentro de estas primeras actuaciones también está previsto que la brigada de obras acondicione las deficiencias de las calles del casco histórico con el fin de que estén adecentadas para la próxima celebración de la feria medieval.
Pérez Insua reconoció que se ha encontrado el parque del monte de Bolo en estado de bastante abandono propiciado por la falta de atención hacia el mismo del anterior equipo de gobierno. No obstante, apuntó que es imposible mantener una vigilancia permanente en el lugar.